CAPITEL DE JOB



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La secuencia

Aunque el artista no se ciñe estrictamente al texto de la Biblia [que dice (Jb. 1, 4): "Acostumbraban sus hijos a tener banquetes en su casas, cada uno en su día, invitando a sus tres hermanas a comer y beber con ellos." No menciona que asistiera Job], en el primer capitel corto, con la licencia que se toma de utilizar presidiendo la mesa  a Job, le da contenido al registro superior donde vemos el diálogo entre Dios y Satán señalándole ambos, (Jb. 1, 8-12) "Y dijo Yavé a Satán: <<¿Y has reparado en mi siervo Job, que no lo hay como él en la tierra, varón íntegro y justo, temeroso de Dios y apartado del mal?>> Respondió Satán a Yavé: <<¿Acaso teme Job a Dios en balde? ¿No le has rodeado de un vallado protector a él, a su casa y a todo cuanto tiene? Has bendecido el trabajo de sus manos y ha crecido así su hacienda sobre la tierra. Pero anda, extiende tu mano y tócale en lo suyo, a ver si no te vuelve la espalda>>. Entonces dijo Yavé a Satán: <<Mira , todo cuanto tiene lo dejo en tu mano, pero al él no le toques>>

En el registro superior de siguiente cara larga está representado el siguiente verso de la Biblia donde dice (Jb. 1, 5) "Cuando se completaba la rueda de los días de convite, iba Job y los purificaba, y levantándose de madrugada, ofrecía por ellos holocaustos según su número; pues decía Job: <<No sea que hayan pecado mis hijos y hayan maldecido a Dios en su corazón>>" El lugar de oración lo representa en un templo Románico, con su torre campanario, rematado en una cruz y según se aprecia en la otra cara del capitel el ábside es semicircular con arcos ciego y vano axial, con cubierta de lajas.

En la misma cara larga del capitel, pero debajo de lo anterior, se producen los hechos que posteriormente veremos que le narran a Job sus criados. El primero: "...estaban paciendo los bueyes y pacían cerca de ellos las asnas, y de repente se echaron sobre ellos los sabeos y los cogieron, y a los siervos los hirieron a filo de la espada." El segundo: "...ha caído de cielo fuego de Dios a las ovejas y a los mozos, consumiéndolos." El tercero: "...los caldeos, divididos en tres tropeles, han dado sobre los camellos, apoderándose de ellos."

Por último, llega el cuatro siervo y le dice: "...estaban tus hijos y tus hijas comiendo y bebiendo vino en la casa de su hermano el primogénito, y vino del otro lado del desierto un torbellino y conmovió las cuatro esquinas de la casa, que cayó sobre los jóvenes, y todos han muerto."

En el registro superior de la primera cara larga del capitel y a continuación de Job orando, vemos cuando van llegando los mensajeros a contarles las desgracias acaecidas:

En la siguiente cara finalizan las desgracias de Job, colocando emparejadas dos escenas que se producen en diferentes tiempos. La primera se trata de cuando (Jb. 2, 7) "Salió Satán de presencia de Yavé e hirió a Job con una ulceración maligna desde la planta de los pies hasta la coronilla de la cabeza" De la cual le consolaba su mujer y sus tres amigos, Elifaz, Bildad y Sofar (en la escena hay cuatro hombres, uno imberbe, por lo que el cuarto puede tratarse de Elí que en la Biblia dice "...que los otros eran más entrados en días que él") :

Con la cura milagrosa finaliza en la mitad derecha del capitel la narración de las desgracias de Job. Donde vemos a Yavé asomando entre las nubes bendiciendo a Job. Un ángel presencia la escena.

En el Epílogo del Libro de Job (Jb. 10, 11) dice: "Vinieron a él todos sus hermanos y hermanas y todos sus anteriores conocidos, y comieron con él en su casa..." por lo que, volviendo al inicio,  cerraríamos la historia con la primera imagen:

 

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